La Comisión Europea ha publicado el 17 de octubre el primer documento de orientación para ayudar a los países de la UE a aplicar la Directiva revisada sobre la eficiencia energética de los edificios. Este documento aclara que, a partir del 1 de enero de 2025, se deben suprimir todos los incentivos financieros para la instalación de nuevas calderas autónomas alimentadas por combustibles fósiles. Esto incluye subvenciones, préstamos preferenciales e incentivos fiscales para la compra e instalación de calderas que utilicen gas natural, petróleo o carbón, independientemente de si forman parte de un proyecto de renovación.

Además, el documento describe las excepciones en las que se pueden mantener ciertos incentivos. Por ejemplo, los sistemas de calefacción híbridos solo pueden recibir apoyo si su proporción de energía renovable es considerable y el incentivo es proporcional a esta cuota. También se permite el mantenimiento de incentivos aprobados con fondos de la UE y aquellos concedidos a nivel nacional, regional o local que ya se hayan comunicado a los beneficiarios.

La Directiva revisada establece un marco para lograr un parque inmobiliario totalmente descarbonizado en la UE para 2050, con un plazo de transposición hasta el 29 de mayo de 2026 para la mayoría de las disposiciones. Sin embargo, el artículo 17 debe ser transpuesto antes del 1 de enero de 2025. La Comisión seguirá elaborando orientaciones sobre otros aspectos de la Directiva actualizada.